Lugar de origen de los mundialmente reconocidos Voladores, el pueblo mágico de Papantla se jacta de ser uno de los pueblos más ricos en cultura a lo largo de sus años. Cuna de la zona arqueológica El Tajín y la deliciosa vainilla. Compuesto por tierras ancestrales, llenas de cultura y costumbres totonacas, así como por mágicos paisajes e imponentes construcciones.
Entre sus calles se pueden encontrar majestuosas construcciones religiosas, al igual que impactantes obras del mismísimo Teodoro Cano; también existe un museo nombrado después de él, en el que se relatan increíbles historias y se exponen objetos típicos del pueblo.
Algunas de las actividades que pueden ser realizadas aquí son: el senderismo por sus tierras, caminatas por sus cascadas e incluso hacer rafting en el río. Para relajarse, existen opciones como los temazcales o las salidas a comer. Si se busca qué comer en la zona, es una obligación probar los bocoles y los famosos besos papantecos, sin mencionar el adquirir la vainilla local en cualquiera de sus presentaciones.